Somos influenciables por naturaleza. La repetición es una técnica sutil.

Si casi toda la gente que te rodea te dice lo mismo, tu realidad se convertira en lo que tu escuchas que te dicen repetitivamente.



La culpa es del jefe de redacción, o del dueño del periódico, o del sistema que acepta este juego de periodismo. El reportero o comentarista fiel, solo quiere trabajar en su profesión para poder vivir. Así se desprende de culpa y escrúpulos.



Los niños y jóvenes son un terreno fácil para ser convencidos en nuevas ideas, generadas como corrientes de opinión repetitivas, con el lenguaje apropiado.